Muchos son los llamados pero pocos los elegidos. Con esta frase tan de película se explica perfectamente qué es un funnel o embudo de conversión. Y es que puede que tengas una gran audiencia que navega por tu sitio web pero no todos acaban realizando alguna compra.
Por el camino, y por distintos motivos, se van perdiendo consumidores, describiendo una gráfica con forma de embudo. Analizar dónde y por qué se producen esas pérdidas es de gran utilidad para los Profesionales del Marketing. Poner una solución a esta fuga equivale a mayor número de leads y, por lo tanto, de éxito en la estrategia de venta.
Errores más comunes a lo largo del funnel
Básicamente son tres. El primero y más importante es el engorro de los trámites. Vivimos en una época donde queremos procesos simples y ágiles. Si antes de hacer el clic definitivo tengo que rellenar cuestionarios interminables que me hacen perder el tiempo y me obligan a dar un montón de datos es muy probable que desista y deje el camino a medio recorrer. Primer error. Facilitemos el tránsito por ese funnel.
En segundo lugar, el concepto Buyer Persona debe estar claro. Si no tienes bien definido tu target estarás intentando matar moscas a cañonazos. Quizás aciertes a alguna pero el porcentaje de error será muy elevado. Esto suele estar relacionado con un mal análisis de tu web. Hay que detenerse a estudiar los datos de las páginas visitadas, por quién, cómo, desde dónde y durante cuánto tiempo. Después, habrá que tener activada la “búsqueda y captura” del lead para que pase rápidamente de prospecto a prospecto cualificado y acabe por comprometerse con nuestra marca mediante transacciones comerciales.
Por último, aunque no menos importante, tenemos la calificación de los leads. En esencia, los hay fríos y calientes y esa metafórica temperatura indica si son recién llegados a nuestro sitio o son habituales y recurrentes en sus interacciones. Su tratamiento es distinto y confundirlos puede llevarnos a perder conversiones.
A mayor amplitud en la etapa final del funnel (recuerda las cinco fases: Atracción, Consideración, Decisión, Cierre y Deleite), más usuarios podrán traspasarlos. Los recursos que te proponemos en Criteo son útiles para mejorar tu estrategia en todas las fases.