En los últimos años el número de cargos de Científicos de datos (CD) ha aumentado de manera significativa. Este tipo de cargo puede tener múltiples definiciones y uno de los impactos más importantes ha sido la manera en la que ha cambiado la percepción de otro antiguo cargo bien valorado: Los Analistas de Datos (AD). Tras mi experiencia de 10 años en el entorno de Analíticas y Ciencia de datos, te explico por qué la creciente popularidad de los cargos de CD no debería influir en la manera en la que consideramos los cargos de AD.
El futuro de los cargos de Analíticas y Ciencia de Datos
En Criteo, tengo la oportunidad de participar en el Global Analytics and Data Science Council, compuesto por directivos de la empresa y cuya misión es dar forma al futuro de los cargos de Analíticas y Ciencia de Datos en nuestra organización. En este contexto, hemos tenido que tratar el aumento del título Científico de Datos, por no hablar de otras palabras estrambóticas que lo acompañan.
Además de mi cargo en Criteo, he tenido la oportunidad de intercambiar opiniones con expertos de start-ups innovadoras, valientes y scalers más consolidadas. Todas las conversaciones sobre este tema han traído consigo una conclusión clara: Cómo el aumento del cargo de CD ha marginado la reconocida importancia del cargo de AD.
Sigue habiendo confusión entre los cargos de Científico de Datos y Analista de Datos, pero, sobre todo, el CD se suele asociar, a menudo, con una versión mejorada del AD. Una de las consecuencias menos deseables es que aquellos cargos de AD se sienten presionados y ceden a llamarse ahora CD, como si ser AD estuviera pasado de moda. Estos dos perfiles se solapan, a menudo, en términos de conjuntos de habilidades, pero hay algunas diferencias importantes. Y aunque son dos piezas clave de una organización centrada en datos, hay algunos puntos importantes que dejar claros.
Los Analistas de Datos no son simplemente los predecesores de los Científicos de Datos.
Basándonos en la conversación actual, uno puede tener la impresión de que los Analistas de Datos son los ancestros de los Científicos de Datos, que van quedando atrás debido a una evolución natural. Pero es una forma errónea de verlo. Te explicamos por qué:
1. La diferencia reside principalmente en tecnicismos y modas.
Después de la era del Big Data vino el Machine Learning y ahora la AI o la Artificial Intelligence es la expresión de moda. El nombre CD en el sector ha seguido el mismo camino.
Muchas empresas tratan de estar a la última atrayendo a brillantes analistas ofreciendo rimbombantes cargos de CD. Aunque no sea 100% cierto, es atractivo. Si echamos un vistazo rápido a los empleos ofertados en LinkedIn, vemos que hay el triple de ofertas de Científico de Datos que de Analista de Datos.
2. El cargo de Analista de datos se ha devaluado de manera equivocada.
A pesar del hecho de que los Analistas de Datos y los Científicos de Datos comparten parcialmente una serie de habilidades, su misión debería ayudarnos a distinguirlos. No se espera que utilicen ni desarrollen las mismas habilidades.
Los Analistas de Datos se centran en insights accionables relacionados con la empresa. Tienen más peso en la toma de decisiones empresariales y hacen frente a estrictos condiciones temporales. Su trabajo es ayudar a determinar decisiones empresariales estratégicas compartiendo las mismas condiciones a las que hacen frente los directivos: ciclos de vida de temas más cortos, entornos muy competitivos, discusiones con el cliente en directo, presión de ingresos y mucho más.
No significa que no sean capaces de generar temas a más largo plazo, sino que sencillamente este área no es donde añaden más valor.
3. Los Analistas de Datos conocen el ecosistema del sector, los productos y las cifras del mercado.
De hecho, si sueñas con convertirte en ejecutivo empresarial, prepárate para el éxito con una sólida base como Analista de Datos. No se trata solo de lo que puedes o no puedes hacer: Sino del impacto empresarial que quieres crear.
Los Analistas de datos están en una mejor posición para comunicarse con las audiencias en diferentes equipos y ayudar a interpretar información descubierta. Pueden adaptar fácilmente su vocabulario y tono según a quién se dirijan.
4. Muchos ejecutivos ven a los Analistas de Datos como asesores empresariales.
De hecho, yo he dirigido durante años lo que podría llamarse Analíticas de Datos o Ciencia de Datos en muchas otras empresas. Conozco de primera mano a Científicos de Datos que aportan un increíble valor añadido si se aprovecha su trabajo de manera adecuada: análisis en profundidad y herramientas predictivas, por ejemplo.
No obstante, no sustituirán a los Analistas de Datos en lo que se refiere a influir en la estrategia empresarial y los conocimientos sobre la organización. Te puedo garantizar que cada vez son más los ejecutivos con ganas de trabajar estrechamente con Analistas de Datos, a quienes consideran valiosos asesores empresariales.
Los Analistas de Datos y los Científicos de Datos son más fuertes cuando evolucionan juntos.
El auge del nombre Ciencia de Datos me ha ayudado a reformular lo que yo entiendo por AD y CD y a aclarar lo que hacen ambos cargos. Esta es la oportunidad perfecta para reiterar la importancia del AD y tomar el tiempo necesario para resaltar sus ventajas. ¡Larga vida al Analista de Datos!