Chatbot o reconocimiento por voz, facial o dactilar, apps de ajedrez y conducción sin conductor son algunos de los ejemplos que muestran que la inteligencia artificial (IA) ya forma parte de nuestras vidas con absoluta normalidad.
Gobiernos de medio mundo han entendido que el futuro pasa por la IA y entre sus planes de inversiones y acuerdos con multinacionales figuran distintos proyectos de IA que afectan a sectores tan dispares como el I+D, el comercio o la sanidad.
En Criteo, entendemos que en el ADN de las empresas debe figurar la IA y es por ello que hemos creado un laboratorio para profundizar en el aprendizaje y la formación de profesionales en la materia, Criteo AI Lab, con dos sedes en París (Francia) y Palo Alto (California). Apostamos por la IA para mejorar la comprensión y el estudio de los consumidores, y así poder ayudar a las marcas y retailers a orientar mejor sus estrategias de commerce marketing, personalizando y optimizando los mensajes.
Con Criteo AI Lab pretendemos centrar la investigación en aumentar la conexión entre los usuarios y las marcas y, mediante el uso de la IA, conseguir que los anuncios se perciban como un asistente de compras personal e inteligente.
Ya disponemos de distintas herramientas como el machine learning, que bien utilizadas por parte de nuestros clientes les permite, en el campo del marketing online, pagar únicamente por cada conversión realizada y mediante complejos algoritmos, explorar en las necesidades emocionales de los compradores.
Impacto industrial y laboral
La IA no resta ni divide sino que multiplica. Hay que tener en cuenta que el panorama publicitario online está cambiando rápidamente. Por ejemplo, las recientes políticas de privacidad como el RGPD limitan la forma en la que se recopilan y monetizan los datos, por ello el uso de la IA, la investigación en nuevos sistemas y modelos de machine learning son vitales para la adaptación a los cambios. En este contexto, Criteo no solo se limita a potenciar las experiencias publicitarias altamente personalizadas, sino que se centra, gracias a Criteo AI Lab, en recabar el consentimiento de los usuarios a la hora de emplear sus datos.
En contra de lo que se pudiese pensar, la utilización del correo electrónico no solo no ha reemplazado al correo postal, sino que las cifras han aumentado exponencialmente tanto en número de envíos como puntos de entrega. Este no es más que uno de los innumerables ejemplos que la IA puede aportar al comercio global.
Previsiones de futuro
Según la encuesta creada por Xaxis en asociación con IAB Europe, para conocer el impacto actual y futuro de la IA, el 80% de los encuestados considera la IA como la próxima revolución industrial, debido al potencial que tiene de generar cambios en la industria de la publicidad digital. El 50% opinó que la IA mejoró la productividad y aumentó la ventaja competitiva y el 53% de las agencias cree que la IA ofrece un análisis de marketing más rápido y profundo.
Sin embargo, aún queda trabajo por hacer en términos de confiabilidad y confianza; los encuestados destacaron que las preocupaciones principales a las que se enfrenta la IA en la publicidad digital dependen menos del control humano. Se trata de mantener un equilibro positivo y productivo entre la IA, el trabajo humano y los clientes.
Por hacer una comparación, la IA aún se encuentra a la altura del cerebro de un ratón, es decir, aún tiene una notable capacidad de mejora. En ese inicio de la curva de aprendizaje las empresas se preguntan qué hacer con todos los datos de los que disponen y sobre los que no han obtenido aún el retorno esperado.
Ante esta situación, Criteo apuesta por la inteligencia artificial, creando Criteo AI Lab con el fin de explorar el impacto que está teniendo la IA en la publicidad y el comercio global. De momento, la IA no va a crear una nueva industria, pero la creará. Lo que sí ya ha puesto en marcha es la posibilidad de ser más productivos y eficientes en nuestro trabajo.